martes, 1 de septiembre de 2009

Su Majestad

Allá por 1975 ocurrió una competencia de servilismo hacia el Titular del Ejecutivo de ese entonces Anastasio Somoza Debayle. Los principales aduladores del Titular entre ellos Ministros, periodistas, diputados, miembros del Partido Liberal, en fin, todos los que buscaban la gracia del señor Presidente, se devanaban los sesos para buscar la frase más elaborada de elogio, el título más elegante para llamarlo, el eslogan más “convincente”. De repente, alguien dejó a todos patitiesos y anonadados del susto, pues propuso que para evitar tanto pleito lo más conveniente era elevar al Titular del Ejecutivo de Presidente a Rey. La idea, a pesar de que hubiera tenido eco en más de algún desquiciado mental, solo provocó el disimulo de parte de toda la corte de aduladores, pues la consideraron más allá de todo lo ridículamente razonable de lo que se había manejado hasta ese entonces.

Ahora que 35 años después pareciera que se está conformando una nueva corte de aduladores, con la gran diferencia que los arrastrados de aquella época manejaban de manera independiente su servilismo y ahora son todos manipulados, como ratas detrás de un flautista de El Carmen. Las pintas que llenaron la ciudad capital, acusan un interés en llevar al Titular del Ejecutivo a un estadio superior, que podría en algún momento desembocar en aquella locura del reptil que propuso a Somoza como Rey.

Así que si en algún momento vemos que el Titular del Ejecutivo viaja a Cuba a un tratamiento médico que le cambie la sangre y se la ponga azul, entonces quiere decir que el momento está muy cercano. Los escándalos reales ya los tiene de sobra en su haber para optar al trono por esa vía. Luego vendría el cambio de El Pueblo Presidente por un Hola que reseñe todas las actividades rosas de la pareja presidencial y su familia.
El único perdedor sería tal vez el desvergonzado de Roberto Rivas que se quedaría sin trabajo, pues no haría falta un Tribunal Supremo Electoral, aunque sí un Chambelán de la Corte.

El único obstáculo es por el momento esa piedra en el zapato que se llama Movimiento Pueblo y que se está encargando de quitarle el sueño a la pareja real, digo presidencial, que debe de estar al borde de la meningitis craneando que castigo le va a recetar al pueblo por protestar.